Aprendiendo a desaprender es también aprender.

Las relaciones no son un trato de juego  proyecciones de culpas y expectativas.
Por ello aprender a desaprender sólo puede ser útil para quienes han aprendido que con la culpa; la auto culpa; no evolucionan; sino que se tortura una y mil veces uno mismo y repetidas veces; flagelándose por ello creo que si aprendemos a desaprender lo aprendido; lo que nos hace sentirnos
mal muchas veces; ese acto de autoperdonarnos; o de ser amables con nosotros mismos a pesar de todo; es con la persona con la que tenemos que vivir el resto de nuestras vidas, y quien más que nosotros satisfacernos a nosotros mismos? hacer cosas por nosotros mismos; para nosotros mismos.

Aprendiendo a desaprender lo aprendido  eso también  es aprender  para así vaciarnos de lo que erróneamente el ser humano  durante siglos generaciones; otras vidas incluso  vidas pasadas se nos ha quedado  de manera innata en nuestro  ser y nos ha hecho sufrir porque mucho de lo aprendido no debiera estar ni en nuestro ADN genético; como nos lo han ido amoldando/inculcando  a lo largo de nuestro crecimiento  personal; crecimiento  en edad,mayoría  de edad saber estar; pero no en proyectarnos como seres individuales; en la que somos energía y somos lo que transmitimos en el sentir del ojo, frecuencia vibratoria que desprendemos puede llamarse   alma, espíritu y enriquecimiento  personal que queramos legar( dejar de generación a generación) a otros.

Todos somos uno;todos deberíamos aprender  a dar y recibir  en la medida de la que recibimos en todos los planos existenciales.
Aprendiendo a desaprender se aprende a perdonarse a uno mismo. Cuando las cosas no salen o no
funcionan como nos enseñaron los antiguos maestros que han pasado por la escuela del ordenó y mando y no por la escuela de las percepciones sensoriales y extrasensoriales, somos energía y eso
es lo que trasmitimos y desprendemos.