Un poema prohibido junto a la tumba de Fernando Pessoa
UNA CARICIA PARA EL ALMA
Un poema prohibido junto a la tumba de Fernando Pessoa
Lisboa, Monasterio de los Jerónimos de Belém, lugar donde mi voz quedará resonando en esos muros como algo irrepetible…, como un eco de versos únicos en el patio de su claustro porticado.
Un privilegio decir uno de los poemas de Fernando Pessoa, en un casi sagrado silencio, donde hasta hoy reposan los restos del poeta.
Hoy este lugar es un destino
turístico, antaño refugio de monjes que meditaban entre muros impregnados
de historia. En este lugar el espíritu del poeta, del buscador de eternidad,
se entrelaza con el tiempo del hoy y del mañana. En este lugar se prohíbe crear
y grabar videos, incluso siendo el poema del propio poeta Fernando Pessoa, algo
inconcebible, prohibir que la poesía brote en el aire del pórtico, he tenido
suerte de pasar inadvertida, respirando el poema. Podéis verlo y escucharlo en
el video más abajo.
La poesía allí recitada por mí, seguirá danzando con la memoria y cada una de mis palabras se convertirá en un canto eterno y espontáneo.
Sigo celebrando la vida, en cada lugar nuevo que visito, especialmente en este espiritual espacio donde El Arte, La Paz y la Poesía convergen.
"Empiezo a
conocerme.
No existo"
"Empiezo a conocerme
No existo.
Soy el intervalo entre
lo que deseo ser y los demás me hicieron,
o la mitad de ese
intervalo, porque además hay vida…
Soy esto, en fin…
Apaga la luz, cierra la
puerta y deja de hacer ruido de
zapatillas en el
pasillo.
Quede solo yo en el
cuarto con el gran sosiego de mí mismo.
Es un universo barato."
Fernando Pessoa
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